- Sacá los estantes del horno y dejalos en remojo en la pileta de la cocina.
- Tené a mano el producto de limpieza que hayas elegido para tu horno: podés comprar un limpiador de hornos en aerosol o preparar tu propio limpiador con agua y bicarbonato de sodio. En caso de elegir un producto comercial, leé atentamente las indicaciones de la etiqueta y hacé primero una prueba en una superficie pequeña del horno.
- Rociá el interior del horno, evitando aplicar el producto sobre el ventilador y los elementos que irradian calor.
- Dejalo actuar durante al menos 15 minutos para que afloje los restos de comida adheridos.
- Refregá y raspá el interior del horno para desprender los residuos.
- Enjuagá y, si es necesario, volvé a aplicar el limpiador.
- Acordate de enjuagar la esponja cada tanto para no esparcir la suciedad.
- Por último, humedecé un trapo limpio con agua y pasalo por el interior del horno para eliminar el hollín que haya quedado.
Como Limpiar un horno

09
Abr